La conocí hace algunos años atrás, la vi introvertida callada y sobre todo la vi inocente, su cara la de una niña tímida, al principio no lo note pero luego todo eso me atrapo.
Recuerdo cuando tocaba la puerta de casa, yo sabía que era ella, salía y la abrasaba fuertemente, sintiendo su perfume, yo sentía su ternura. Apoyaba mi cabeza en su hombro y todo lo demás dejaba de existir, ella era mi mundo. Mi pequeño universo, pequeño pero completo, lleno de todo lo que yo necesitaba.
Construí mi mundo dentro del mundo de ella, y me sentía feliz, recuerdo sus manos, recuerdo sus ojos, su mirada, recuerdo, sí, solo recuerdo...
Un día ella se fue y ya no volvió, yo la esperaba, avece me parecía que aun estaba ahí, me volteaba, la buscaba, estaba ahí sí, pero no era ella. Ella se fue hace algunos años.
Muchas veces mientras ella dormía yo la miraba y le pedía que volviera, pero ella no quería volver. Por favor, te necesito, volve, solía decirle. Pero un día me di cuenta, que en verdad ella ya no volvería, que era otra la persona que estaba junto a mí.
Ahora te has ido vos y lo que fuiste, tu esencia, tu ternura, tu inocencia, tu mirada, sí tu mirada, cuanto recuerdo tu mirada, ya todo se fue ahora estoy solo.